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ENTRE LINEAS

26 de abril de 2005- 26 de abril de 2010

Cinco años han pasado desde que nació “Entre Líneas” o ÉL como a veces lo he llamado por “exigencias” del guión literario. Como siempre acudo a este aniversario  con la nostalgia de quienes empezaron conmigo a construirlo  y ya no están. Añoranza  de los que vendrán, alegría por los que están  y admiración por los que me siguen desde el principio porque, la verdad, hay que tener muchas ganas para seguir a alguien sin una doctrina clara. Tengo morriña de lo que empezó siendo este lugar y de lo que es hoy o de lo que no es. Pensándolo bien, esto último es imposible que sea así porque algo seguro que es… aunque a veces no lo sepa ni yo mismo.

 

Sé lo que no es. No es un diario. Podría denominarlo así si escribiese todos los días y no lo hago. Tampoco  es una sucesión de relatos cortos. Hay algunos pero no era esa mi pretensión.  No es una crónica política. A veces escribo sobre ello pero sin seguir una pauta y la política exige eso: estrategia. Aunque haya escrito sobre vivencias mías,  no es una biografía. Eso exigiría mayor lapso de tiempo que uno tan corto de cinco años y unas grandes dosis de sinceridad que no he tenido a lo largo de muchas de ellas. Si, confieso que no he sido sincero en muchas cosas que decía sentir. He escrito desde el despecho  y desde ese territorio no es posible la claridad. Lo que sí encontraréis son grandes dosis de sentimientos, disfrazados en frases grandilocuentes la mayor parte de las veces haciéndoles perder belleza. Pocas, muy poquitas veces, he sabido destilar la emoción por algo o la pasión por alguien y eso es algo que me reconcome.

 

Tal vez “Entre Líneas” no sea más que una historia contada por alguien que no pretende escribir una crónica de su tiempo. Tal vez sea una pasión medida. O el fruto de un entusiasmo efímero. O una táctica “donjuanesca” de un personaje que lo único que pretende es enamorar y ser enamorado por las palabras.


Se oye: Cavalleria Rusticana (Mascagni)

 

16 comentarios

Para Anónim@, felicidades infelices -

La desmemoria es un privilegio que podemos permitirnos los que somos mayores y no hemos alcanzado el Nirvana y siendo conscientes que no alcanzaremos nunca. Además convendrás conmigo que el olvido tiene sus ventajas. No recuerdas el pasado, pero vives el presente pensando en el futuro.

Puedes -seguiré con el trato cercano- transmitirle a Merlín tu saludo personalmente. No creo que se enfade si lo despiertas.

Anónimo -

Mi señor Don Juán, felicidades os giro con retraso, y justo hoy que recordaba un sentido escrito sobre alguien que celebraba su primer año, leo sorprendida esta loa de aniversario.
A fe que no me gustaría incluir dicho escrito en tal sudario.
Recordad quien sois, señor, antes de lapidar vuestros actos.
Os ruego transmitáis a Merlín mi luctuoso saludo.

Para tigresita, análisis acertado -

Evidentemente he disfrutado yo, no más, mucho más. Ya sabes lo que dicen: "la caridad bien entendida empieza por un@ mism@"... ;)

tigresita -

Si se nota tanto sentimiento en tus escritos, y desde luego hemos disfrutado de ellos, pero creo que sobre todo has disfrutado tu mássssssssss.

Para Oso Cavernario, si es que sabe hasta 'latín' -

Si es que ni falta hace que inventen el chip oloroso... ;)

Para Violeta, con su ramito de 'idems' -

Eso es lo que espero yo también, seguir disfrutándonos. Los hedonistas tenemos eso. Un beso primaveral mi querida Violeta.

Para Maria José, haciéndome engordar... -

...con el chocolate (uuuhhhmmmm) y, sobre todo, con las palabras :)

Oso Cavernario -

"Vestigis flairats".........

Violeta -

Desde el primer dia que encontre por casualidad uno de tus textos he seguido cada uno que aparecia nuevo, entraba cada dia esperandolos con ilusion, me han gustado todos y cada uno de ellos. Con alguno me he identificado, con otro quizas no tanto pero una cosa si es cierta, todos me han gustado, emocionado o "excitado". ninguno me ha dejado indiferente... y... si, tb. me he enamorado un poquito de este autor sin rostro pero con un alma llena de sentimientos.
Espero poder seguir disfrutando de ti mucho tiempo.
Gracias.

María José -

Felicidades. Y además te felicito por tu constancia. Yo solo te conozco cinco meses y aunque dices no ser partidario de las celebraciones y de días señalados sé que en el fondo si te gusta.
De una cosa estoy segura…te gusta enamorar con las palabras, las sabes utilizar por eso no has sido sincero en todo.
Desde el despecho es cuando mejor se escribe o desde la felicidad, hay que sentir mucho sea felicidad o sea tristeza para que te salgan esas palabras con sentimientos.
Espero poder felicitarte dentro de cinco años aunque no sea por aquí.
Un placer leerte.
Te regalo besos de chocolate que sé que te gustan

Para Oso Cavernario, haciéndome gozar -

¿Y quién dijo que tu no estabas ahí desde el principio? Siempre está quién quiere estar y siente que está. Así que como soy el que administra esta págibna y eso me da ciertos privilegios, declaro que si, que tu ya estabas ahí. Latente, silente, expectante... ;)

Oso Cavernario -

Gran recorrido del 2005 al 2010. Y aunque yo no sea seguidora desde el principio, es una gozada llegar a descubrir esos escritos, hacerlos propios e incluso seguir los impulsos de "Mascagni". Quien fuera la "soprano" para recibir y esparcir ese "Elixir de Amor"...

Para calma, la optimista más grande -

Muchas gracias y "denadas" ;) Eso de haberte "desvirgado" "blogosferamente" escribiendo como que me da como un regustillo placentero que no veas. Es más, cuanro más te escribo másssssss gustillooooooooo.... Está visto que tendrás que aguantar este placer (virtual, como tu has querido que sea :)) Otro beso igual de eniorme para ti.

calma -

Muchas felicidades, gracias por tantas letras llenas siempre de belleza y esa fina ironía tan tuya. Fueron tus textos los primeros que leí en la blogosfera y nunca he dejado de hacerlo, siempre sigo la estela de tu bien hacer y pienso seguir haciéndolo, siempre que tú nos quieras regalar momentos inmensos.
Un beso grande y el cariño de siempre.

(Fantástica pieza musical).

Para Abril... besos sin puntos suspensivos -

Y una lágrima que rodaba por mi mejilla cayó en mi corazón haciéndole palpitar al son de tus palabras. A mi, hoy, sólo me queda una. Rotunda y sincera. Gracias.

Abril -

Me alegra pertenecer al grupo por los que sientes admiración. Me alegra que, a pesar de no tener una doctrina clara, yo tenga claro seguir tu doctrina. Me alegra haberte sabido leer entre líneas cuando dices haber disfrazado sentimientos. Me alegra poder decirte ahora, pasado el tiempo, que tan intensas fueron tus letras que hasta esas palabras llenas de despecho me hirieron. Me llena de orgullo poder decirte que han sido cinco años donde día a día esperaba tus escritos.

Quisiera decirte “Donjuanlíneas” que no fue tu táctica la que me enamoró sino tus palabras llenas de sentimientos, esos que dices no haber sabido destilar, a mí me llegaron todo este tiempo.

Beso.